La revista 'Paradigma' cumple 20 años

En 2005, en la Universidad de Málaga, tres mentes inquietas decidieron plantar cara a uno de los grandes clichés del pensamiento moderno: la supuesta brecha entre las ciencias y las humanidades. Antonio Heredia, Cristina Consuegra y José Juan Reina imaginaron una publicación que fuera más allá del academicismo encorsetado, una revista capaz de mirar el conocimiento con una óptica generosa y transversal. Así nació 'Paradigma'.

«Queríamos romper con ese viejo tópico de la separación entre humanidad y ciencias», recuerda Antonio Heredia, catedrático de Biología Molecular y Bioquímica y único editor que ha permanecido desde el primer número. «Los temas son mucho más complementarios de lo que creemos. Una visión holística es necesaria para entender la realidad», añade el docente.

Este mes de junio ve la luz el número 27 de 'Paradigma', una edición especial que celebra sus veinte años centrado en la economía circular, la transición ecológica y el cambio climático. No es solo un símbolo de crecimiento; es un testimonio de su vigencia y proyección internacional: once colaboraciones, casi 200 páginas, arte intercalado y, por primera vez, un artículo en inglés. «Algunos textos han superado las 3.000 descargas. Nos leen mucho en Latinoamérica. Y todavía hay artículos de 2006 que se siguen bajando», apunta Heredia.

La prudencia con la que nació la revista se refleja en el nombre de su primer número: el «número cero», dedicado a la figura de Ortega y Gasset. Desde entonces, cada edición ha girado en torno a un tema central tratado desde ópticas diversas: científica, técnica, humanística. Esa estructura permanece, al igual que dos secciones fijas: el apartado poético, con colaboraciones de autores ligados al ámbito malagueño, y 'El carro de heno', una recopilación de columnas breves que toma su nombre de un famoso tríptico del Bosco, símbolo del mundo en toda su complejidad.

A partir de 2017, la revista pasó de semestral a anual. ¿El motivo? Dedicarse más a fondo a cada tema, mejorar la edición y cuidar el diseño. Desde entonces, cada número se maqueta profesionalmente con mimo, de la mano de Ana Moliz, y se apoya en el talento de estudiantes de Bellas Artes para enriquecer su apartado artístico.

«Una revista como esta no se sostiene sin apoyo», reconoce Heredia. La financiación ha sido uno de los grandes desafíos, especialmente en una publicación gratuita y online, sin ánimo de lucro. La Universidad de Málaga ha colaborado a lo largo de los años, pero ahora ha sido la Diputación de Málaga quien ha financiado la maquetación del número 27.

El equipo editorial, renovado y más amplio, ya piensa en el próximo número. Aunque el tema aún no está decidido, sí está clara la voluntad de continuidad: «Me gustaría que personas más jóvenes tomaran el relevo. Estoy seguro de que lo harán incluso mejor que yo», afirma Heredia, que no esconde su cariño por el proyecto: «'Paradigma' es una parte de mí».

A lo largo de dos décadas, 'Paradigma' ha sido mucho más que una revista cultural universitaria. Ha sido un laboratorio de ideas, una plataforma de divulgación y una apuesta decidida por un conocimiento sin fronteras disciplinarias. Su aniversario no solo celebra el pasado, sino que marca un punto de partida hacia lo que aún queda por contar.

Como resume Antonio Heredia con orgullo y entusiasmo: «Siempre digo que el siguiente número será el mejor. Porque si no crees en lo que viene, ¿para qué seguir?»

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